
Psicoterapia para la depresión en Barcelona y online

Padecer depresión es como estar agotada sobre una roca, atrapada en una niebla densa y oscura que no te deja ver.
Oyes que tus seres queridos te aconsejan e insisten para salir de ahí, pero no puedes hacer tuyas sus palabras.
Sientes la necesidad de levantarte y responder a esas llamadas, pero no sabes dónde pisas.
El cansancio de permanecer ahí te consume, pero no encuentras ni la fuerza ni los motivos.

Nuestro trabajo
no es sacarte de esa roca,
sino sentarnos
contigo.
Disipar la niebla juntas y que tú veas el camino que quieres escoger.
¿Qué es la depresión?
Es un trastorno mental que afecta profundamente nuestro bienestar. Al padecerla se experimenta una pérdida significativa de motivación, energía y disfrute de casi cualquier actividad. Esta condición puede impactar todas las áreas de la vida, desde las relaciones personales hasta el rendimiento laboral, afectando la capacidad de tomar decisiones y de experimentar placer o satisfacción.
Vídeo sobre la depresión
Síntomas ¿Cómo sé si tengo depresión?
Para saber si se padece un trastorno depresivo es esencial un diagnóstico psicológico. La depresión no es simplemente sentirse triste, sino una condición que altera el equilibrio emocional y puede persistir durante largos periodos de tiempo si no se trata adecuadamente. La Asociación Psiquiátrica Americana (APA) considera los siguientes síntomas:
Estado de ánimo depresivo durante la mayor parte del día, casi todos los días.
Disminución del interés o placer en actividades que anteriormente eran agradables (anhedonia).
Aumento o disminución significativa del peso.
Alteraciones en los patrones de sueño (insomnio o hipersomnia).
Sentimientos de intranquilidad o, por el contrario, de lentitud.
Fatiga o dificultad para realizar tareas cotidianas.
Sentimientos de ineficacia, inutilidad o culpa.
Dificultad para concentrarse o mantener la atención.
Pensamientos recurrentes sobre la muerte o el suicidio.
Causas de la depresión
La depresión es el resultado de una interacción entre factores genéticos, psicológicos y sociales. Los factores psicológicos que más pueden pesar para acabar teniendo depresión son los siguientes:
Traumas
Las experiencias adversas, como la pérdida de un ser querido o los abusos pueden desencadenar un trastorno depresivo mayor. Los traumas tempranos aumentan la vulnerabilidad a desarrollar el trastorno en la vida adulta.
Patrones de pensamiento
Las personas con patrones mentales disfuncionales: distorsiones cognitivas, pensamientos negativos sobre sí mismas, el mundo y el futuro. Un patrón clave es la rumiación, que consiste en pensar repetidamente sobre problemas o emociones negativas, lo que intensifica el sufrimiento y prolonga la depresión.
Manejo emocional
La manera en que una persona enfrenta el estrés también juega un papel fundamental en el desarrollo de la depresión. Las personas con estilos de afrontamiento evitativos o que reprimen sus emociones son más propensas a caer en depresión cuando se enfrentan a situaciones adversas.
Factores de personalidad
Rasgos de personalidad como el perfeccionismo, la baja autoestima o la autocrítica son factores que incrementan la probabilidad de desarrollar depresión. Estas características dificultan la gestión emocional y favorecen la aparición de estados de ánimo negativos.
Falta de red social de calidad
Las relaciones saludables son fundamentales para el bienestar emocional. El aislamiento o la insatisfacción social son factores clave, pueden empeorar los síntomas depresivos y aumentar el riesgo de recaídas. Que podamos contar con una red de apoyo es de las cosas más importantes.
Estrés de minorías
La discriminación y el rechazo social que enfrentan ciertos grupos (LGTBYQ+, personas racializadas…) aumenta el riesgo de depresión. Las experiencias de exclusión y desigualdad crean un ambiente emocional agotador, lo que nos puede hacer más vulnerables.
¿Cómo trabajamos?
La depresión puede sentirse como un peso difícil de soportar, afectando tu estado de ánimo, energía y tu visión de la vida. En nuestro centro, ofrecemos un enfoque terapéutico integrador, que combina lo mejor de diferentes técnicas y corrientes psicológicas para ayudarte a superar este desafío. Nuestro objetivo es acompañarte en un proceso de sanación completo, teniendo en cuenta tanto tu bienestar emocional como tu salud mental y física.
Enfoque Humanista: Acompañamiento Empático y Aceptación
En nuestra terapia, creemos que lo más importante es que te sientas comprendido y apoyado. A través de un enfoque humanista, te ofrecemos un espacio seguro, sin juicios, donde puedas explorar tus emociones más profundas. Te ayudaremos a entender tus sentimientos y, al mismo tiempo, trabajaremos juntos para que puedas reconectar con tu verdadero ser y tus deseos.
Escucha empática: Te ofreceremos un entorno donde tus emociones y pensamientos serán validados, para que te sientas escuchado y acompañado en tu proceso de sanación.
Desarrollo personal: Trabajaremos para que recuperes tu confianza y autoestima, ayudándote a explorar las causas de tu malestar y a encontrar maneras de reconectar con tu bienestar interior.
Terapia Cognitivo-Conductual: Comprender y Cambiar Patrones Negativos
La depresión puede estar alimentada por pensamientos negativos que nos limitan. En nuestra consulta, utilizamos herramientas de la TCC para ayudarte a identificar y cambiar esos pensamientos que suelen generar o perpetuar la tristeza y el malestar.
Reestructuración de pensamientos: Identificaremos los pensamientos automáticos negativos que afectan tu estado de ánimo, y trabajaremos para reemplazarlos por ideas más realistas y constructivas.
Técnicas de activación conductual: La inactividad puede agravar la depresión. Te ayudaremos a retomar actividades que te generen satisfacción y bienestar, como hacer ejercicio, establecer nuevas rutinas y cuidar tu salud general.
Mindfulness y Aceptación: A veces, la clave está en aprender a aceptar las emociones difíciles sin que nos controlen. Usamos técnicas de mindfulness para que puedas estar más presente y menos atrapado en pensamientos negativos.
EMDR: Sanando las Heridas Emocionales
Si tu depresión está relacionada con experiencias traumáticas o recuerdos dolorosos no procesados, podemos incorporar EMDR. Esta técnica es especialmente útil para aliviar el sufrimiento causado por traumas pasados, ayudando a que esos recuerdos ya no tengan el mismo impacto emocional.
Reprocesamiento de recuerdos: EMDR te ayudará a procesar experiencias dolorosas de manera que pierdan su carga emocional negativa, permitiéndote verlos desde una perspectiva más sana.
Sanación profunda: El objetivo es que puedas liberarte de las creencias limitantes que los recuerdos traumáticos pueden haber dejado, como "no soy capaz" o "no merezco ser feliz".